miércoles, 27 de enero de 2010

Las frases

Hace años colecciono frases populares, refranes y proverbios de todo tipo de temas... Les busco en sitios de internet, diccionarios, textos literarios, periódicos... Un buen día pensé que algunas expresiones que manifestaban mi opinión y sentir en algunos de mis trabajos o entrevistas, podían entrar a formar parte de dicha colección.
Es momento de derramar nuevas palabras y compartir otras certezas porque: "El escritor de verdad derrama sobre el papel palabras que brotan desde un profundo rincón de la memoria y del alma."
Fernando López Peralta - Daniel Lara

sábado, 23 de enero de 2010

En la nariz del payaso (antecedentes)

No soy precisamente amante de estos personajes, aunque un buen par de risas, sonrisas y carcajadas me han robado... Hace unos días tuve la breve oportunidad de improvisar en el papel de uno de ellos... Fui uno de los 4 Payasos Media Vista... Cantamos, bailamos y discutimos sin llegar a ningún acuerdo, excepto que era un grupo tan profesional, talentoso, espectacular... que llamarímos a nuestro show: MEDIA VISTA SOCIAL CLUB...

No me divertí, no lo disfruté, no quisiera repetir la experiencia... Pero no puedo arrepentirme porque esos pocos minutos buscando representar la jovialidad y colorido de un payaso me llenaron tanto de emociones que desde entonces no he dejado de sentir.

Curiosamente, hace ya un año conservo el libreto de una breve pieza teatral que anhelo poner en escena... No son payasos sino mimos, pero ahora quisiera que sean payasos porque comprendo mejor lo que pueden sentir estos seres de eterna sonrisa, aunque por dentro la vida se les va destrozando de a poquito y eso puede ayudar a que meditemos cuán payasos somos y qué tan verdadera es nuestra felicidad.

EN LA NARIZ DEL PAYASO

-Pronto-

domingo, 17 de enero de 2010

Locura de Amor

Lo recuerdo bien, fue el último de los pacientes que visitamos aquella mañana cumpliendo con nuestra jornada de trabajo social. Era un hombre todavía joven, atractivo y saludable. Tan saludable como puede serlo cualquiera que viva bajo los efectos de tantos medicamentos administrados para controlar su condición. Estaba concentrado en lo que hacía. Regresé diez años más tarde, ahora como médico y él continuaba allí. Más viejo, menos erguido y más lento, pero igualmente concentrado. Cuando una de las enfermeras me quiso hablar de él le dije que no hacía falta.

Tres meses más tarde pasé frente a su puerta, me detuve y lo busqué pensando encontrarlo entregado a su tarea de tantos años: escribir con una caligrafía diminuta aquel nombre de mujer. Ya no quedaba un especio en alguna de las cuatro paredes, había empezado a rayar las sábanas y el colchón; dijo que no escribía en el suelo porque nadie pisotearía su ferviente amor.

Esa tarde, pensando que no le causaría ningún daño, lo llevaron a una nueva habitación. Al verla tan blanca -tan vacía- se metió en la cama, se acurrucó abrazando la almohada y murió de soledad.

miércoles, 13 de enero de 2010

Rumbo al altar

Criatura incauta del destino; diminuto insecto aleteando con desenfreno para llegar a donde todos van, hacia donde todos vuelan. Dime: Por qué insistes en sufrir, aún sin tener sentido, con el vuelo fatal a la luz de una vela en el altar.